La visión del mercado personalizado en agentes identificables es un error (…)

La visión del mercado personalizado en agentes identificables es un error: ninguna persona es el mercado. En las sociedades modernas, los mercados son redes complejas necesariamente impersonales, que fomentan y aprovechan la especialización, y consiguen así la cooperación eficiente de un número de personas que jamás habrían unido sus esfuerzos si ello hubiese requerido el conocimiento y la identificación individual de cada uno.

 A los socialistas (de todos los partidos, que diría Hayek) les repugna la idea de algo no controlado, y por eso gustan de fantasear con teorías conspirativas sobre unos malos que mandan. Es la gran excusa para intervenir, porque, después de todo, si los mercados están manejados por las multinacionales o por los especuladores, entonces será mejor que los controlen “democráticamente” las benéficas autoridades. 

Carlos Rodríguez Braun, A pesar del gobierno. 100 críticas al intervencionismo con nombres y apellidos, Madrid, Unión Editorial, S.A. 1999, pp.  222-223