Transformar el agua en salto, el salto en kilovatios y el kilovatio en luz; transformar una sociedad de campesinos que viven miserable­mente en una sociedad industrial en expansión, (…)

«Transformar el agua en salto, el salto en kilovatios y el kilovatio en luz; transformar una sociedad de campesinos que viven miserable­mente en una sociedad industrial en expansión, domesticar los mi­crorganismos y concertarlos en una pluralidad indefinida de estrategias terapéuticas o convertir los rincones del universo en fincas de recreo o en parques infantiles…»[1]  todo eso es humanizar el univer­so material, y para todo ello es necesaria la contribución del trabajo humano.

[1] Choza, «Sentido objetivo y subjetivo del trabajo», en Estudios sobre la «Laborem Exercens», BAC, Madrid 1987, p. 261.